Ninguna novia logra evitar por completo la ansiedad, y más cuando el almanaque señala que son pocos los días que faltan para el emocionante día. Sin embargo, existen tres claves fundamentales para poder contrarrestar la ansiedad que toda novia sufre: aceptar ayuda, delegar y cuidar de la relación con la pareja.
La primera clave es aceptar la ayuda que te brinden familiares y amigos. No quieras ser la súper novia que todo lo puede. Organizar una boda es un trabajo duro y con el trabajo y otras responsabilidades, no siempre se tiene tiempo de ocuparse de todo. Pero estás rodeada de personas que te quieren y desean ayudarte: madre, padre, suegros, padrinos de boda, las damas de honor…
Así que pide ayuda para resolver las pequeñas cosas que se interponen en el camino. Vale la pena pedir ayuda para distribuir las invitaciones, degustar los postres, escoger las flores y demás. De esta manera tus seres queridos se sentirán especiales y, de paso, te harán el proceso más liviano.
Recién casados
La segunda clave es delegar. No existe mejor forma de organizar una boda sin sufrir ansiedad que delegar algunas tareas. Suelen ocurrir fallas en cualquier matrimonio, fiesta de empresa, cumpleaños y otros eventos. Esto sucede porque, por más perfeccionista que sea quien está a cargo de la organización, nadie puede controlar todo. Puede llover, un proveedor puede fallar, una dama de honor sentirse mal, el sacerdote puede equivocarse en el nombre del novio. Mil cosas pueden ocurrir y esto escapa de tu control. No sirve de nada preocuparse por aquello que no tienes control, mejor concéntrate en lo que puedes.
Wedding Checklist
Por último, y no menos importante, es cuidar la relación con tu pareja. La ansiedad suele ocasionar estragos en la relación entre los novios. Por eso una clave es no descuidar tu pareja durante la organización de la boda. Tu relación con el novio es lo más importante en el matrimonio. Después de todo, la fiesta es para celebrar la unión de ustedes, ¿verdad? Cuando te das cuenta que estás peleando por tonterías, como el relleno de la torta, recuerda esto. Para ello, fija un día a la semana en que puedan salir, ir al cine o cenar y hablar sin que el tema de la boda sea mencionado.
Procura poner en práctica estas claves para contrarrestar la ansiedad y cuando te despiertes en el día de tu boda, mírate en el espejo y prométete a ti misma que ninguna sorpresa te arruinará esta maravillosa jornada.
